Primero las malas noticias: El La era del V8 en Mercedes-AMG ha terminado oficialmente. El atronador M177 de ocho cilindros y 4.0 litros biturbo es impulsó todas las máquinas musculares de la serie AMG 63 desde 2015 es no mucho para esta tierra. Esto es lo que lo reemplaza: un tren motriz híbrido inspirado en la Fórmula 1 que combina el mas poderoso del mundo coche de producción cuatro cilindros (con un turbocompresor asistido eléctricamente, nada menos) para un motor eléctrico que impulsa el eje trasero a través de una caja de cambios de dos velocidades. En el Mercedes-AMG C63 SE Performance 2024, el primer AMG en lucir la transmisión completamente nueva, eso significa un máximo de 671 hp y la friolera de 752 lb-ft de torque. Sí, eso nos ayudará a superar la pérdida del V8.

El nuevo C63 marca una nueva era en AMG, una empresa que ha pasado casi medio siglo convirtiendo los Mercedes V8 en ruidosas trituradoras de neumáticos. La transmisión extremadamente elaborada del ’24 C63 parte de una base impresionante: el turbo de cuatro cilindros y 2,0 litros M139L, desarrollado por primera vez por AMG para el Mercedes-AMG A45, CLA45 y GLA45. En estos modelos, el pequeño motor turbo era el cuatro cilindros más potente jamás instalado en un vehículo de producción, desarrollando 416 hp y 369 lb-ft de torque. Ahora, gracias a un inteligente eléctrico turbocargado, este motor desarrolla aún más potencia: 469 hp a 6,750 rpm y 402 lb-ft de 5,000 a 5,500 rpm. Eso significa que el M139L de 1.991 cc rompe su propio récord como el cuatro cilindros de producción más potente de la historia, produciendo un pelo por debajo de los 235 CV por litro de cilindrada, o en otras palabras, un poco más de 117 CV por litro. cilindro.

Esta salida es proporcionada por un turbo recientemente ampliado con asistencia eléctrica, lo que significa que el turbo puede acumular energía eléctrica antes de que la presión del escape tome el control, lo que ayuda a eliminar el retraso y crear una respuesta más precisa. Esta es la primera aplicación de producción de automóviles de esta tecnología de turbocompresor eléctrico, que proviene directamente de las transmisiones híbridas de Fórmula 1 actuales y aprovecha la arquitectura eléctrica de 400 voltios del nuevo C63.

Of course, the new huge turbocharger isn’t the only instance of electric power boost. The new C63 has a 201-hp, 236 lb-ft electric motor driving the rear axle through a two-speed gearbox, assisting the gasoline engine during hard acceleration. With AMG Performance 4Matic+ all-wheel drive with Drift Mode, the C63 puts a maximum of 671 hp and 752 lb-ft of torque to all four wheels, with the gasoline engine driving through AMG’s nine-speed automatic transmission with a wet clutch in place of a torque converter for snappier acceleration and gear shifts.

Mercedes says the new muscle sedan can sprint from zero to 60 mph in 3.3 seconds, and power from both the longitudinally-mounted gas engine and the rear-axle electric motor can be shifted to the front axle when the rear wheels slip. The two-speed gearbox that transmits the rear-axle motor’s torque shifts automatically based on speed and load; the lower of the two ratios is good for up to 87 mph. The motor delivers 94 hp continuously, with the full 201 hp available in 10-second bursts.

The 400-volt, 6.1-kWh, 196-lb, liquid-cooled lithium-ion battery driving the axle motor rests above the rear axle for optimum weight distribution. While the new C63 is technically a plug-in hybrid, and can reach speeds of up to 81 mph on electric power alone, Mercedes-AMG was quick to point out in a press release that “the battery is designed for fast power delivery and draw rather than longest possible range.”

The new C63 bears a passing resemblance to lesser C-class sedans, but benefits from a ton of AMG-specific changes. The wheelbase has been stretched by 0.4 inches, with the front-end bodywork lengthened by 2.2 inches. Overall, the new C63 is a full three inches wider at the front fenders and 3.3 inches longer nose-to-tail. The new hybrid muscle sedan rides on standard 19-inch staggered wheels and tires, with 20s optional.

The compact performance sedan has standard rear-wheel steering, which makes the car more nimble in tight turns and more stable during high-speed highway maneuvers, and rides on Mercedes’ AMG Ride Control adaptive suspension with steel springs. The new C63 offers a whopping eight drive modes: Electric, Comfort, Battery Hold, Sport, Sport+, Race, Slippery and Individual, each of which tweaks the drivetrain output, steering, suspension and sound.

Because, yes, this is a four-cylinder hybrid, and that means AMG had to resort to augmented drivetrain noises to replace the hammering rumble of that old twin-turbo V8. A single loudspeaker in the front bumper and a two-speaker soundbar at the rear emanate warning noises when the C63 is driving in pure EV mode; when traveling under internal-combustion power, the system picks up sound from a pressure sensor in the exhaust system and “enrich[es] antes de que se emita al interior a través del sistema de entretenimiento de audio, lo que permite experimentar el sonido característico de AMG. El C63 cuenta con frenos de rotor de hierro con pinzas delanteras de seis pistones y pinzas traseras de un pistón, así como cuatro niveles de frenado regenerativo que van desde una regeneración cercana a cero hasta una conducción completa con un pedal.

En el interior, hay mamparas y mamparas e iluminación ambiental y molduras de alto brillo y mamparas y mamparas.

Mercedes-AMG aún no ha revelado cuándo saldrá a la venta el nuevo C63 SE Performance, ni el fabricante de automóviles ha revelado los precios. Sin duda conoceremos toda esta información antes de que Mercedes invite a los periodistas a conducir este vehículo por sí mismos.

Sabemos desde hace algún tiempo que Mercedes-AMG iría en esta dirección. Los grandes V8 están pasados ​​de moda (a pesar de que el AMG V8 de 4.0 litros no estaba este grande en el gran esquema de las cosas). Algunos fanáticos de los engranajes llorarán y chillarán al respecto. Pero si la alternativa es esto: una Clase C con más potencia y par motor que nunca, con capacidad de conducción puramente eléctrica enchufable y tecnología turbo e híbrida inspirada en la F1, es un poco tonto llorar por lo que se ha ido a la pasado.