Los científicos están cerca de descubrir los secretos de misteriosas señales del espacio profundo, gracias a un descubrimiento especial que involucra una ráfaga de radio rápida (FRB) repetida. Imaginemos un destello de luz de radio, más brillante que mil millones de soles y que dure sólo un milisegundo. Es un FRB y normalmente provienen de más allá de nuestra galaxia, la Vía Láctea. La mayoría son eventos únicos, pero algunos «repetidores» disparan múltiples ráfagas, dejando a los científicos perplejos acerca de sus orígenes.
Un estudio reciente publicado en el Avisos mensuales de la Royal Astronomical Society Abrió la caja misteriosa un poco más. Descubrieron un FRB repetitivo muy activo comportándose de una manera completamente sin precedentes. Este parlanchín cósmico emite ráfagas con un extraño efecto de «silbido deslizante», insinuando algo nuevo y emocionante en el ámbito de los fenómenos del espacio profundo.
Aunque la causa exacta de los FRB sigue siendo un misterio, este nuevo descubrimiento representa un avance importante en la comprensión de estos enigmáticos objetos celestes. Es como encontrar una palabra nueva en un idioma extranjero, que ofrece una pista tentadora para una conversación completamente nueva con el universo.
De acuerdo a cnn, Los astrónomos intentaron determinar si había una tendencia en los retrasos de tiempo entre cada ráfaga, similar a otras ráfagas de radio conocidas de repetición rápida. Pero los investigadores no pudieron detectar ninguno para FRB 20220912A, lo que sugiere que los eventos celestes también pueden ser impredecibles.
«Este trabajo es apasionante porque proporciona tanto la confirmación de las propiedades conocidas de los FRB como el descubrimiento de otras nuevas», dijo en un comunicado de prensa la autora principal del estudio, la Dra. Sofia Sheikh, becaria postdoctoral de ciencia nacional MPS-Ascend de la Fundación en el Instituto SETI.
¿Qué son las ráfagas de radio rápidas?
De acuerdo a espacio.com, Fast Radio Bursts (FRB) son intensas ráfagas de ondas de radio que pueden emitir tanta energía como la que emite el sol en tres días, pero en solo unas pocas milésimas de segundo. Muchos de estos acontecimientos siguen siendo un misterio.
Los FRB provienen de todo el cielo y tienen frecuencias de alrededor de 1.400 hercios, aunque se han detectado algunos con frecuencias tan bajas como 400 a 800 hercios. Algunos científicos estiman que podrían ocurrir 10.000 FRB cada día en puntos aleatorios del cielo sobre la Tierra. Sin embargo, la mayoría de los FRB duran sólo unos pocos milisegundos, y cuando su energía llega a la Tierra, es 1.000 veces más débil que la señal de un teléfono celular si fuera emitida desde la Luna y detectada en la Tierra. Debido a que estas señales son tan débiles y breves, los FRB son increíblemente difíciles de detectar.